La fórmula de la creatividad

Chris Baumal
6 ago 2024
2 Min. de lectura

Actualizado: 16 mar

La creatividad no es exclusiva de personas con alto nivel intelectual o con una gran capacidad de análisis; de hecho la creatividad por sí sola, para muchos expertos, es considerada como un “tipo de inteligencia”. La inteligencia creativa es la capacidad de generar ideas novedosas y plantear soluciones originales.

Pero el secreto de la creatividad se puede revelar con la siguiente fórmula…

Hay muchas formas en que la creatividad se manifiesta de forma cotidiana en las personas; por ejemplo: Quien es buenísimo inventando nombres o quien dice bromas muy ocurrentes. Pero para pensar en grande y llevar la creatividad a un nivel de trascendencia, ésta divergencia de ideas debe mezclarse con otros ingredientes.

Creatividad = divergencia + ?

Para ser creativo se necesita tener conocimiento de técnicas; por ejemplo: Picasso, antes de hacer sus pinturas “cubistas”, estuvo casi 10 años pintando distintos estilos, hasta que en su periodo “primitivista” empezó a descomponer las formas reales en geométricas (Les Demoiselles d'Avignon, 1907), marcando el inicio del cubismo. El famoso pintor conocía las técnicas y estilos artísticos, hasta que, con inspiración de otras culturas y pinturas es que logró su estilo característico.

Creatividad = divergencia + técnica + ?

En la carrera de la invención del avión los hermanos Wright competían con Samuel Pierpont Langley, aquel que tenía el apoyo financiero del gobierno, mientras que los hermanos obtenían sus ingresos de su taller de bicicletas. La gran diferencia estuvo en que los hermanos Wright, además de creatividad, tuvieron un enfoque sistemático, para comprender los fenómenos físicos. Tras varios prototipos aprendieron cómo el humano podría planear por los cielos.

Creatividad = divergencia + técnica + iteración + ?

Finalmente el ingrediente más complicado y desde mi punto de vista el más importante… DESAPRENDER.

Erich Fromm afirma que el hombre (como especie) es libre, pero al momento de asumir la libertad, a éste le da miedo la responsabilidad que conlleva ser libre. Entonces si el hombre es capaz de tener valor para desprenderse de los miedos a la hora de asumir esa libertad, podrá experimentar que la creatividad entra en su cuerpo y su mente. El primer paso para ser creativo es aprender a desaprender, retando las ideas que creemos tener, abriéndonos a nuevas realidades con una mentalidad flexible en constante aprendizaje.